La Pureza de la Energía Sexual.

   El alquimista para lograr una energía lo más puro que se pueda, debe seleccionar pensamientos puros, alimentos puros, emociones puras y todo esto produce los Cuerpos Solares. El iniciado debe de darle el tiempo de maduración necesario a la energía transmutada, para que ésta pueda ser utilizada por el organismo. Esto quiere decir que si él transmutó a las 8:00 P.M. no es posible, ni conviene que a las 5:00 A.M. vuelva a transmutar nueva vez.
   Se recomienda que el que esté haciendo la Gran Obra se dé baños con plantas aromáticas (ver “La Magia de los Perfumes”), pues estos baños accionan en el cuerpo vital o etérico. Entre las plantas necesariamente deben estar la Ruda y la Salvia. El baño actúa sobre el cuerpo físico y los vapores de las plantas sobre el cuerpo vital. Los vapores deben de llegar al cuerpo desnudo y después el agua de estas plantas se la echa al cuerpo físico.
   De hacerse los baños de vapores es recomendable que se eviten corrientes de aire frío o bañarse ese día con agua fría, pues pueden enfermarse. Es recomendable hacerlo todas las semanas o sino por lo menos una vez en el mes.
   Todo esto sirve para limpiarse de fluidos, larvas, etc. Las larvas astrales le hacen daño al alquimista, entre los daños que hacen está el que le impide el recuerdo de las experiencias astrales. También se puede usar azufre en los zapatos.
   Todas estas recomendaciones hacen que se logre una correcta transmutación, y que cuando el esperma llegue a hervir a los 100º y él explote, se rompa y se convierta en vapores.